Presos enfermos de VIH-SIDA prefieren morir

Presos enfermos de VIH-SIDA prefieren morir
JUEVES, 19 DE SEPTIEMBRE DE 2013 11:49
ESCRITO POR DANIA VIRGEN GARCÍA

Cuba actualidad, San Miguel del Padrón, La Habana, (PD) En las cinco
prisiones que existen en Cuba para enfermos del VIH-SIDA, los presos
sufren maltratos físicos y sicológicos, son discriminados y humillados.

La alimentación que reciben es poca y mala; la asistencia médica deja
mucho que desear. Las condiciones de vida en los destacamentos son
deplorables, principalmente por la falta de higiene.

Cuando los presos reclaman asistencia médica, algún beneficio penal o
ser trasladados a sus provincias de origen, son castigados y golpeados
por los carceleros.

Algunos presos han muerto por enfermedades que no fueron atendidas a
tiempo, pero los jefes de las prisiones y la Dirección de Cárceles y
Prisiones siempre halla cínicas justificaciones.

Los presos enfermos llegan a tales extremos de desesperación, que muchos
de ellos intentan suicidarse o se autoagreden para que las autoridades
atiendan sus reclamos.

En la prisión para enfermos de SIDA en la provincia de Villa Clara, en
los últimos meses, estas situaciones llegaron a extremos dramáticos.

En el mes de marzo, el reo Karel García García, de 27 años,
encontrándose en una celda castigo, se dio candela. Quedó con serias
secuelas producto de las quemaduras. Pedía ser trasladado para una
cárcel en su provincia natal, para estar cerca de su familia. Ya lleva 9
meses en celda de castigo, aislado.

Otros reos en el mes de abril se auto agredieron con la misma petición:
Alcides Delgado de 26 años; Oneidi Pupo Sierra, de 25 años; Alexander
Majuan Ponce, de 44 años, quien lleva 7 meses en celda de castigo,
aislado; Alfredo Lara, de 25 años, y Denis Cedeño de 24 años. En el
mismo día, todos estos reos se propinaron heridas en varias partes del
cuerpo (brazos, piernas, y abdomen) para reclamar ser trasladados a
prisiones en sus provincias de origen.

Han pasado cinco meses y todavía ninguno de ellos ha sido trasladado.

En la tarde del viernes 28 de agosto, estos reos atentaron nuevamente
contra sus vidas.

Karel García se propinó una herida en el antebrazo izquierdo, que
requirió una sutura de seis puntos.

Alexei Zamora Zamora, de 33 años, intentó ahorcarse con su pantalón en
la celda de castigo. Fue descubierto y descolgado por otro reo. Después
de este intento fallido de suicidio, horas más tarde, Zamora se propinó
una herida en el antebrazo izquierdo que le ocasionó abundante pérdida
sangre. Le fueron suturados 9 puntos.

Denis Cedeño, ese mismo día, se propinó 7 heridas en varias partes del
cuerpo, las cuales requirieron más de 40 puntos.

Alcides Delgado, encontrándose en el área de castigo, se auto agredió,
haciéndose cuatro heridas en los antebrazos, que requirieron 21 puntos.
Además, se infligió otra herida en la parte posterior de la pierna
derecha, que requirió 17 puntos.

Ese mismo día, Alfredo Lara se cosió la boca con alambre. El jefe de
orden interior, Raúl Jiménez, y varios guardias, lo aguantaron
violentamente en el suelo y con una pinza le quitaron los alambres.
Luego, fue arrastrado a una celda de castigo. Allí se propinó dos
heridas en las partes posteriores de ambas piernas.

En el mes de agosto estuvieron en huelgas de hambre los reos Alexander
Ponce y Lázaro Martínez.

A principios del mes de septiembre, Ornier García Ortega, para reclamar
que lo trasladaran a una prisión en su provincia, se declaró en huelga
de hambre. Fue conducido a una celda de castigo, donde se propinó una
herida en el brazo derecho, que requirió 8 puntos.

Pero los carceleros reaccionan cruelmente ante estos intentos de
suicidio y autoagresiones.

Cuando los reos se autoagreden, luego de ser suturados, son devueltos a
las celdas de castigo, donde los esposan de manos y pies y así los dejan
a veces hasta más de tres días. A la hora de la comida, le zafan una
mano y tienen que comer semi-acostados. Cuando tienen que hacer sus
necesidades fisiológicas, gritan desesperados, pero al no hacerle casos
los carceleros, o informarles que solamente se les retirarán las esposas
a la hora de comer, o si el jefe de la prisión los autoriza, se tienen
que orinar y defecar en los pantalones y así se quedan hasta que son
sacados de las celdas.

Muchos de estos reos, que son de provincias lejanas, no reciben visitas
de sus familiares, porque sus circunstancias económicas no les permiten
viajar todos los meses.

Por eso, es que reclaman, aun a riesgo de sus vidas, ser trasladados a
prisiones en sus provincias de origen. Pero que los trasladen es
difícil, incluso para los que mueren.

Los reos de otras provincias que fallecen a veces son mantenidos por más
de 7 días congelados en una morgue. A los familiares no se les avisa,
hasta que el cadáver es trasladado a su provincia natal. Es entonces que
avisan a los familiares y les dicen que murió hace unas horas, de SIDA.
Cuando los velan, los cadáveres se descomponen enseguida y hay que
sepultarlos antes de tiempo.

Para Cuba actualidad: dania.zuzy@gmail.com

Source: "Presos enfermos de VIH-SIDA prefieren morir | Cuba noticias
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