11 de marzo de 2011 • 12:50
(AI) instó hoy a las autoridades cubanas a que pongan inmediatamente en
libertad a un activista de derechos humanos detenido hace tres meses y
actualmente en huelga de hambre, mientras espera ser juzgado a finales
de marzo.
Se trata de Néstor Rodríguez Lobaina, presidente y cofundador del
Movimiento Juvenil Cubano por la Democracia, a quien las autoridades
detuvieron en diciembre a raíz de una reunión que organizó en su casa en
agosto del año pasado y por pancartas contra el Gobierno que colgó en el
exterior de su domicilio.
A Néstor Rodríguez, a su hermano Rolando y a otros tres miembros del
Movimiento Juvenil Cubano por la Democracia -Enyor Díaz Allen, Roberto
González Pelegrín y Francisco Manzanet- se les imputan, según AI,
delitos contra el orden público relacionados con un ataque que llevó a
cabo contra su casa una turba opuesta a la reunión que allí se celebraba.
Los cinco fueron detenidos el pasado agosto, pero puestos en libertad al
mes siguiente, y sólo Néstor Rodríguez Lobaina volvió a ser arrestado el
9 de diciembre por agentes de la seguridad del Estado en Guantánamo, en
presencia de su hija, de 10 años, a la que dejaron sola en la calle
mientras se llevaban a su padre.
Néstor Rodríguez ha pasado más de tres meses en la cárcel por expresar
sus opiniones, defender la democracia y promover los derechos humanos en
Cuba, denunció Amnistía Internacional.
La organización le considera "un preso de conciencia encarcelado sólo
por ejercer su derecho a la libertad de expresión", por lo que instó a
las autoridades a ponerle en libertad inmediata e incondicionalmente.
De no hacerlo, "cargarán con toda la responsabilidad por el impacto que
pueda tener su huelga de hambre en la integridad física de Néstor",
señaló hoy Gerardo Ducos, de Amnistía Internacional.
"El encarcelamiento de Néstor es un ejemplo más de la supresión de los
derechos a la libertad de expresión y asociación en Cuba", agregó AI en
un comunicado.
Detenido en el combinado de la cárcel de Guantánamo, Rodríguez se
declaró en huelga de hambre el 15 de febrero y al día siguiente fue
trasladado a una celda de aislamiento, donde se le denegó el agua
durante ocho días.
El activista cubano vio deteriorarse su salud por la huelga de hambre y
el 28 de febrero fue trasladado, primero, a una enfermería dentro de la
prisión y, el 1 de marzo, al hospital provincial Augustino Neto.
Néstor Rodríguez se queja de haber sufrido palizas y amenazas de otros
reclusos durante su estancia en la cárcel.
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